Mantener un vehículo en condiciones incluye lavar periódicamente sus partes no solo la pintura, para que no se dañen o corroan por agentes como el polvo, excrementos de pájaros, barro o el salitre.
Para quienes laven su auto en casa, hay algunos pasos básicos para tener en cuenta que en Opencars queremos mostrarte. Asegurate de tener las herramientas necesarias ante de comenzar a lavar tu auto como: esponjas suaves, guantes para el lavado y paños de gamuza, ya que no lo rayan. Baldes grandes, jabón líquido, cera para autos, son algunos otros que se pueden utilizar.
¿Ya tenés todos los elementos? Entonces podés empezar a lavarlo. Recordá no comenzar en un día soleado o muy caluroso, ya que esto hará que el agua se seque muy rápido y puede dejar manchas de jabón en la superficie de el mismo. Mejor optá hacerlo en un día nublado o estacioná el auto en la sombra.
¡Listos para comenzar a lavar tu auto!
Lavar la superficie
Mojá el auto con la manguera de arriba a abajo. Retirá con el agua la tierra de la superficie y el barro de las ruedas y guardabarros evitando que no se transporte a otras partes del vehículo. Hacer esto con movimientos circulares, pasarlo por toda la superficie, enjuagarlo en los recipientes con agua antes de aplicar nuevamente más jabón líquido para autos y luego, retirarlo con abundante agua. No coloque el chorro de la hidrolavadora en el caso de usarla, muy cerca de la pintura.
Frotá suavemente el resto de la superficie con una manopla de lavado. Secarla de arriba hacia abajo con paños de microfibra ya que no rayan la pintura ni los cristales y para enjabonar y secar, destine paños exclusivos, así también en los neumáticos.
Cuando la pintura está absolutamente seca, se encera colocando un poco de producto sobre un paño y se esparce en círculos sobre la superficie. Si hay un daño o raya menor, pulir con una pasta para este fin. En modo perfeccionista, hay productos de limpieza específicos para las tasas, los neumáticos, los plásticos y los cristales.
Aplicá la cera recomendada. Recordá aplicar cera también en las ruedas del coche.
Por último, limpiá las ventanas. Podés usar agua y jabón para limpiarlas, pero los limpiavidrios te darán mejores resultados.
Lavar el interior
Mientras se seca la carrocería, se limpia el interior con un paño seco, se retira el polvo y en las piezas expuestas al sol se aplica silicona en aerosol para protegerlas de los rayos UV. Se aspiran todas las superficies.
En los tapizados, aplicar productos que sacan los olores y manchas. Es recomendable probar antes en un área pequeña o usar sistemas de vapor que los desinfectan. Si son de cuero, protegerlos con renovadores que humectan las superficies dejándolos no grasosos.